lunes, 5 de diciembre de 2011

Hay tantas cosas lindas que la vida tiene para ofrecernos, solo que nosotros nos empeñamos en preocuparnos por las malas, y por lo que nos falta en vez de valorar las pequeñas pero grandes cosas que tenemos. Nos enroscamos en problemas que quizá no valen la pena, y nos dañamos a nosotros mismos tratando de ser especiales para aquella persona que queremos que se fije en nosotros, pero lo que no nos damos cuenta es que SOMOS especiales, y solo necesitamos otra persona que se de cuenta de eso sin que tengas que esmerarte por demostrarlo. Solo es cuestión de ser quien sos, y de esperar a que la persona indicada llegue a tu vida y se de cuenta de lo especial que eres, y lo especial que pueden ser ambos complementados. No perdamos el tiempo tratando de resultar más interesantes para personas que quizá nos prestan un rato de su atención y luego esa atención se la regala a otra, o a tantas otras… Y no solo hablamos de amor, sino también de amistades. Preferible pocas y verdaderas que muchas y falsas. Yo, la verdad, me cansé de rodearme de gente falsa que solo estaba serca mío para sacarme provecho cuando necesitaba, gente a la que yo escuchaba per ellos no querían nunca escucharme, gente que solo se preocupaba por ellos mismos. Esos no son verdaderos amigos. Los verdaderos amigos están en las malas y en las buenas. Yo los pocos que tengo los considero más que amigos, hermanos, y esos son los verdaderos, por los que me pongo muy mal cuando los peleo, pero por los que lucho para no perderlos, e intento ser lo mejor y más buena amiga posible para ellos, e intento ayudarlos y lograr que no se decepcionen de mi, o que lo hagan lo menos posible… aunque bueno, espero no lo hagan. En fin, hoy me doy cuenta que a pesar de que por momentos creo que toda mi vida está perdida, se que no es así, que tengo mil razones para sonreir y seguir adelante, y el solo pensar que no se lo que me espera, pero que se que quedan infinitas cosas por vivir todavía, me pone bien, muy bien. Y más si puedo vivir esas cosas al lado de las personas que más amo. Bueno… solo me falta una, pero todavía no pierdo las esperanzas de aunque sea arreglar las cosas. NADA ESTÁ PERDIDO